La ruptura del vínculo matrimonial es el Divorcio, solo puede ser
decretado por un Juez de Familia, después del debido proceso judicial
establecido en el Código de Familia para cada caso particular.
Los motivos para romper el matrimonio, han sido establecidos por la ley
en tres grupos, aunque en la práctica y vida cotidiana las parejas puedan tener
miles de motivos para no continuar con su matrimonio; en suma, la ley define
estos tres motivos:
- Cuando la pareja se ha
separado definitivamente por uno o más de un año consecutivo.
- Cuanto la vida en pareja se
ha vuelto insoportable.
- Cuando ambos han decidido
divorciarse voluntariamente.
En varias ocasiones, algunos de mis clientes, han preguntado si puede iniciar un proceso de divorcio, aun cuando su pareja le asegura que no cederá, y que no quiere divorciarse. La respuesta
es “SI”, sí puede iniciarse un proceso de divorcio, aun cuando la pareja se
niegue.
De los tres motivos para divorciarse, el menos complicado, es cuando
ambos cónyuges han decidido dar por terminado el vínculo, porque, en ese caso,
el juez solo debe avalar los acuerdos a los que han llegado para disolver el
vínculo matrimonial.
Los otros dos motivos, son procesos entablados por medio de un abogado
salvadoreño, mediante una demanda, expuestos ante un juez de familia, y las
partes tienen el derecho de alegar en contra, oponiéndose a lo demandado,
allanarse a lo demandado, o agregar hechos que el juez debe valorar para emitir
una sentencia conforme a la justicia.
El costo de un divorcio depende del profesional que atiende el caso, de
lo complejo que puede volverse defender los derechos de su representado,
apelaciones, recursos, preparación de pruebas, entre otros aspectos.
Tengo la experiencia en divorcios, puedo ayudarte a resolver y a romper
con ese vínculo, haz una pregunta en este blog, o ponte en contacto con mi
persona para una asesoría más personalizada.
Gracias por visitar este blog.